La Península de Baja California y Pacífico del Norte ha visto disminuir año tras año el número de tortugas golfina, laúd y prieta por los cazadores furtivos que comercian con su caparazón y trafican con sus huevos.
A pesar de ello, el Programa Nacional de Conservación de Tortugas Marinas y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) apuntó que en la Dirección Regional Península de Baja California y Pacífico Norte, los datos son muy positivos ya que en 2012-2013 se han liberado más de 470 mil crías de tortuga golfina, un 185% más que en el periodo de anterior.
Estas cifras se han conseguido gracias a la protección de las 5.607 nidadas que se produjeron en este último año, que permitieron la liberación de muchas más crías que en ejercicios anteriores.
Para estas iniciativas incluidas en el Programa Nacional de Conservación de Tortugas Marinas se han invertido en 2012 casi 77.610 euros (1.300.000 pesos) en el Programa de Empleo Temporal que también apoya a la economía local de esta zona, a sus habitantes y a las familias más desfavorecidas.
A pesar de esta información alentadora, tan solo se ha experimentado este espectacular incremento en las tortugas tipo golfina a diferencia de las de especie laúd y prieta.