Por Chantal Camacho Chávez.- ¿Cómo curar un corazón roto o adolorido?, pregunté a la voz del infinito, al Dios eterno que habita dentro de todos y, a continuación, está fue la respuesta, una que tal vez me inventé o que tal vez sirve de remedio o consuelo, aunque sea temporal:
Es a modo de receta, nunca puede fallar, necesitarás los siguientes elementos:
1)Una pizca de amor propio,
2)Dos abrazos tuyos,
3)Una sonrisa,
4)Palabras dulces y tiernas, de esas que llegan a lo más profundo del alma cuando está rota,
5)Una buena dosis de fe y esperanza,
6)Mucho espacio para ti misma, para reflexionar (se generosa contigo),
7)Muchos momentos a solas contigo, para cultivar tu paz,
8)Y por último, una gran cantidad de la nada, de ese vacío, de adentrarte en lo desconocido, en esos caminos pocos explotados quizá por tu mente, pero que tu alma necesita, más tarde te explicaremos con detalle.
9)Condimentos para nutrir tu alma de novedades
10)Aderezos para cultivar la fe
11)Y una sobredosis de amor del bueno para ti, de ese amor que nutre y que restaura, si aprendes a recibirlo y a darlo en altas, cantidades, sin escatimar su costo, sin juicios y sin condicionamiento, cuando hayas alcanzado esto, habrás sanado por completo ese corazón roto, habrás sentido una liberación profunda en tu alma, pues hacia allá te está llevando toda está crisis: hacia el reconocimiento del amor puro que tú eres y que proviene de ti.
Hasta este momento te has encargado de ocultar tu amor, para que nadie la mire, para que nadie lo toque, para que nadie lo encuentre, para que nadie se entere, lo has mantenido oculto, como un tesoro escondido.
Lo que necesitas hacer en este momento es:
Olvídate de esa mente lógica, hazla a un lado. Sepárate de ella por momentos o instantes y sólo siente lo que hay adentro de tu corazón, escúchalo, voltéalo a ver e identifica todo lo que necesita: escucha su dulce voz, atiende todas sus necesidades, pues es un llamado de AMOR, con mayúsculas, pues en este momento lo más importante es eso: atender ese llamado de AMOR profundo hacia TI.
Vamos, abrázate, se amorosa contigo, date valor para hacer los cambios profundos que hoy necesita tu alma.
Háblate con cariño y con respeto, justo eso es lo que necesitas hoy saber: respeta todo lo que estás sintiendo.
Escúchate, libera ese amor que ésta tan escondido dentro de ti, desentiérralo para que todos lo puedan ver, de eso se trata este momento: de entregar ese amor a quienes les pertenece.
Si te cuesta trabajo hacerlo, por temor a volver a sentirte lastimada, puedes empezar en silencio, teniendo una conversación silenciosa con esa parte de ti que merece tu amor y tu respeto: tu alma, a ella entrégale primero todo este amor, llénala de amor, por completo, que no quede ningún huequito, rodéala y envuélvela por completo de todo este AMOR, cuando logres esto que es tan importante para ti, estarás lista para compartir o nutrir a otros con todo tu amor.
El amor restaura cuando es sincero y sin juicios
El amor crece y se expande en todas las direcciones
El amor se multiplica
El amor te guía y te acompaña por siempre
No te satures de cosas o compromisos que no son tuyos, da la mano a otros siempre que lo necesiten, pero primero atiende ese llamado de AMOR por ti que es urgente.
Hoy es el momento, en este instante, restaura y sana ese corazón con tu propio AMOR.
Arcángel Rafael y Gabriel.