Por Jose Antonio Cordero.- El corazón es el motor principal para el mantenimiento del cuerpo, la supervivencia depende de él, pero curiosamente siendo el jefe bombea su contenido, pero no lo retiene. El corazón tiene maestría en la entrega, el el líder en abrir nuevos caminos, aunque el cerebro tome su orgullo en la organización y etapas. Quizás con tantos pensamientos y predominio de la mente, no sepamos todavía el valor del corazón como promotor de nuestra vida, grandes proyectos estuvieron antes en el corazón y luego pasaron a la mente.
Seguro que nos ha pasado que hemos visto un lugar y tenemos la sensación de haber estado allí antes, son lugares que nos hacen pasar muy buenos momentos y algunos que nos disgustan. Igual sucede cuando vemos a algunas personas por primera vez, en el cerebro no hay ningún registro de identificación pero algo sucede cuando el corazón se alegra más de lo normal.
Entregarse siempre debe hacerse con sentido de acción correcta. Entrega es darse, y al mismo tiempo es abrirse al conocimiento, como el agricultor que ara la tierra, la abre y luego pone la semilla, el resto lo hace la naturaleza. Hay buenas semillas que si no tienen la ayuda humana no fructificarán, la naturaleza ayuda y cuida hasta de los detalles más pequeños. En la entrega total el éxito está asegurado.
ES LA PUREZA DEL CORAZON LA CLAVE DEL ÉXItO Y NO LOS MEDIOS DISPONIBLES
La entrega del corazón puede ser muy diferente a la entrega de la mente, que puede volverse cabezota, se pueden conseguir muchas cosas por cabezonería y también perderlas. No es aconsejable enfocarse en ganar mucho pero abusando de los demás, o quedarse con una gran parte. Eso se puede lograr, y son llamados los éxitos de la mente y de la astucia, pero el corazón puede sufrir por abusos de poder o perder a la familia por falta de atención y cuidado.
En la entrega total nunca se pierde, ningún esfuerzo se pierde en el camino hacia la perfección. Hacer un trabajo o actividad con desgana es mucho más agotador que hacerlo con buena entrega. Es importante adaptarse a las circunstancias, porque cada fase de crecimiento conlleva su responsabilidad.
Sobre el puente de la perfección y la libertad, destacamos más por lo que somos que por lo que tenemos. Para avanzar primero debe ocurrir la orden mental para dirigirnos hacia un lugar convenido, y después está el corazón que por propio merecimiento puede sucederle como a la buena semilla que es ayudada por otros humanos que nos abren el camino y siembran lo merecido.
Confianza plena es una cualidad que el corazón entiende, pero la mente podría no entender nada y lo más probable es que empiece a generar dudas y miedos.
Si cada acción está gobernada por la Confianza y la Entrega, todo saldrá bien. La entrega plena nunca fue ciega, porque está alumbrada por la luz del corazón.
Aprender a trascender es caminar por la senda del corazón. Trascender es muy fácil, es por esto que el fluir del corazón sea espontáneo.
La vida florece y nos libramos antes del sufrimiento, si hay manos expertas que saben poner la semilla del buen conocer el arte de trascender. La falta de confianza, por dudas y miedos, impide el rápido crecimiento.
Si la evolución humana se detiene es porque falta de confianza y entrega. Nada puede hacer la naturaleza por quien no tiene confianza en sí mismo