Por Inocencia del Pino Nava.- No esperes que el mundo que te rodea se ocupe de resolver tus problemas, pues estás muy equivocado, tampoco creas que tu felicidad depende del exterior, dependiendo así de los demás para ser feliz.
Cuando estés cansado de sufrir, cuando la decepción te inunde de tristeza, cuando creas que nadie te comprende ni se ocupen de ti, cuando la soledad sea tu única compañera, recuerda la máxima de Sócrates «Conócete a ti mismo y conocerás al mundo» el que llega a conocerse comprende que su espíritu es libre, que no puede ni debe depender de nadie, que el egoísmo y el orgullo son dos grandes males que como sustancias venenosas nos van aniquilando poco a poco, que la falta de amor nos enferma.
El mundo solo es un reflejo de nosotros mismos, vigilemos nuestros pensamientos, quizá nos sorprendamos de ver que no somos tan buenos como creíamos. Nos pasamos media vida pensando en el pasado, y la otra media en el futuro, sin darnos cuenta de que lo más importante se nos escapa de las manos, el pasado por mucho que queramos no volverá, aquello que hicimos ya tuvo sus consecuencias, no hay marcha atrás si nos equivocamos solo queda aprender de esos errores, el futuro nunca llega porque siempre es el presente, siempre es hoy, aprovechemos el momento actual porque antes de que nos demos cuenta ya habrá pasado.
Dentro de cada ser humano se encuentra ese tesoro, ese diamante que brilla con luz propia, tan hermoso que podría iluminar cualquier oscuridad, nos hemos encargado de enterrarlo tan profundamente que estamos convencidos de la oscuridad en la que nos encontramos, sin caer en la cuenta de que tenemos una fuente inagotable dentro de nosotros, llegar a esa fuente inagotable de luz es el trabajo que a cada uno nos corresponde hacer, y no hay otra manera que esforzándonos en conocernos a nosotros mismos.
A veces cuando corremos de un lado a otro perdemos mucha energía y nos agotamos, seamos pacientes y démonos la oportunidad de encontrar nuestro propio camino.
Si hay odio en tu vida, resentimiento, rencores, necesitas dejar ir, no se puede ser feliz guardando en nuestro corazón tanta negatividad, si somos capaces de perdonarnos y perdonar a los que nos ha hecho daño, nos liberamos de una carga muy pesada.
La mente siempre está ocupada, quisieras dejarla tranquila, poner la atención en un punto determinado pero mil pensamientos vienen de golpe, apaciguarla requiere tiempo, no intentar luchar contra los pensamientos, dejarlos ir, es un ejercicio que debemos practicar, aprendamos a relajarnos, a calmar nuestra mente para poder conectar con nuestro ser interior, todos necesitamos tiempo para crecer interiormente pero solemos estar muy ocupados en todo tipo de quehaceres, hay que dejar atrás viejos hábitos del pasado y tirar abajo esquemas que están cristalizados en nuestra mente y que se han quedado obsoletos, interponiéndose en nuestro desarrollo personal.
Si queremos cambiar el rumbo de nuestras vidas hemos de confiar en nosotros, la falta de esta confianza nos bloquea de tal manera que llegamos a convencernos de que somos más débiles que los demás y que estamos limitados a realizar aquello que deseamos, esto es un tremendo error, lo único que hacemos con ello es dar más poder a otros fortaleciéndolos y debilitándonos nosotros.
El poder de convicción es tan poderoso que nadie puede pararlo, solo depende de que creamos en él y todo es posible, cuando tenemos confianza adquirimos una fuerza que nos empuja a seguir hacia adelante, se produce un cambio, nos hacemos valientes, decididos, con más poder interior.
Hay que mantener en la mente pensamientos elevados y positivos para convertirnos en personas dignas. Todo se refleja en nuestro carácter, cuando alojamos en la mente pensamientos destructivos, puede costarnos muy caro, atraemos todo tipo de dolencias y enfermedades.
Todo lo que hagamos a los demás nos será devuelto, si siembras odio no esperes recoger amor, si queremos un mundo mejor tendremos que empezar a ser mejores nosotros y dejar de quejarnos continuamente de los demás, si tú cambias el mundo cambia.
Cuando nos conocemos mejor ya no necesitamos depender de nadie, porque somos capaces de vivir como nosotros queramos y no como quieran los demás, los pensamientos son poderosos, es una energía real, todos podemos contribuir a que la paz se encuentre en cada rincón de la tierra, los pensamientos no tienen fronteras, pueden llegar a cualquier sitio por muy lejos que estés, ojala cada noche antes de dormir y cada mañana antes de empezar el día seamos capaces de tener un pensamiento de paz, para ello no importa que creencias tengas, ni qué posición social ocupes, si eres pobre o rico, tu pensamiento de paz seas quien seas será una bendición para el mundo.
Platón dijo: «EL MUNDO DE LAS IDEAS INCIDE EN EL MUNDO FÍSICO, PIENSA BIEN Y HARÁS LO CORRECTO»