Un estudio realizado conjuntamente por las Universidades de Emory y Columbia, ha analizado, por primera vez, la relación entre la contaminación y las enfermedades neurodegenerativas en EEUU.
El coautor principal de la investigación dice: “Nuestro estudio se basa en la evidencia que indica que, las exposiciones a PM2.5 (partículas en suspensión de menos de 2.5 micras), están relacionadas con un mayor riesgo de deterioro de la salud neurológica. Hablamos incluso de concentraciones de partículas muy por debajo de los estándares actuales”.
Los datos comprobados indican que, por cada aumento de 5 microgramos por metro cúbico de aire en las concentraciones de PM2.5, se da un 13% de aumento en el riesgo de ingresos hospitalarios por enfermedades como el Parkinson, el Alzheimer y otros tipos de demencias.
“Nuestro estudio se ha realizado en EEUU, pero probablemente pueda ser semejable a otros muchos países del mundo. Necesitamos, urgentemente y cada vez por más razones, políticas estrictas en cuanto a la reducción de contaminación a nivel mundial” añade la investigadora principal del Departamento de Salud Ambiental de Harvard.