Por Isabel María Campillos Pérez.- Puedes vivir dentro de una burbuja como si no pasará nada.
Puedes creer que todo está bien, pero por dentro te estás muriendo.
Mueres de insatisfacción y frustración en una lucha constante en la que nada es suficiente.
Sientes impotencia porque no sabes como llenar ese vacío interior.
Tu falta de amor por ti te hace creer que te faltan cosas por conseguir, que no eres válido todavía.
Te han domesticado para creer que la vida es complicada y que hay que conseguir cosas continuamente para ser «útil» y sentir la «felicidad».
Pones tu bienestar emocional en manos de personas, cosas y circunstancias porque tu mismo no eres capaz de darte lo que necesitas.
Y así, te fundes en el consumismo y en la anestesia que atenua tu dolor y prolonga tu sufrimiento.
Parches y más parches para no mirar aquello que requiere tu acción inmediata.
Tu hermetismo mental no te deja ver con claridad, tu falta de honestidad te hace recaer hasta la saciedad en hábitos tóxicos aprendidos de sociedad completamente enferma y desconectada del amor.
Te enseñan a no amarte haciéndote dependiente de ambientes, personas y estados emocionales carentes de significado para ti, pero a través de los cuales logras identificarte como persona.
Buscas sentirte comprendido por los demás cuando ni tu mismo te comprendes.
Necesitas que tu exterior te valide en lugar de posicionarte como valor preferente.
Te engañas asumiendo una falsa responsabilidad huyendo de las cosas que debes si o si confrontar.
Continuamente escapas del miedo y de ti mismo porque prefieres morir anestesiado que vivir dolorido y comprometido (contigo).
Al final no te quedará más remedio que volver a ti si quieres salir de la burbuja y respirar.
Aunque siempre podrás elegir tu falso suicidio a través de la autodestrucción.
La persona que ama su vida no deja ir sus ilusiones, ni permite que su luz se apague.
La persona que se valora no permite que un ambiente tóxico la desintegre.
La persona que bendice su vida no intoxica su cuerpo mente con conductas que lo alejan del SER, haciéndolo desaparecer.
Por mucho que sonrias a la vida sino soluciones tu caos interno quedarás sin oxígeno en tu burbuja.
Viniste a este mundo a ser no a desaparecer.
Naciste paea vivir ilusionado no anestesiado.
Da luz a tu ser, hazte caso de una vez!!!