Por José Antonio Cordero.- Siguen dándose esa errónea costumbre de cortar o aniquilar a quien sobresale o a toda nueva tendencia que viene con fuerza. La envidia, el miedo a perder posición o liderazgo, ocupar una posición o cargo que está por encima de la preparación personal o merecimiento, querer ser maestro antes de terminar de ser aprendiz, querer ser aquello que todavía no es, aparentar ser aquello que todavía no se ha realizado, incluso dar apariencias de ser una persona muy evolucionada o iluminada con el propósito de ocupar una posición adelantada y tener seguidores que permita vivir holgadamente, todas esas situaciones traen nefastas consecuencias.
Tener miedo a perder una posición o cargo puede llevar a tomar medidas que podrían ser delictivas. Lo peor es hacerse o apoderarse de algo que por su naturaleza no pertenece. Las herencias están llenas de apoderamientos inapropiados y de abusos por una posición privilegiada. Apoderarse de algo que debería compartirse es un abuso por privilegio que trae mal karma tanto para el nuevo propietario como para sus herederos.
Ocupar una presidencia o alto cargo gubernamental y además de gobernar dedicarse a podar a quien sobresale o cortar toda tendencia que toma un fuerte auge social podría ser un acto delictivo, a no ser que sea impedir o frenar un ataque que ponga en riesgo la salud de la sociedad.
Realizar o dirigir un acto de represión, castigo o muerte es una muestra inequívoca de ineptitud. Mandar o gobernar no está asociado a tener la capacidad de cortar o eliminar vidas.
El mandatario no es dueño de ningún alma que no sea la suya. Matar es siempre una maldad humana, venga de quien venga.
Ni siquiera el Creador dispone de la vida de sus seres creados, por tanto aquellos que incluso matan en el nombre de Dios no tienen ni idea de quién el es Creador, ni se acercan en lo más mínimo al propósito de la Creación. Son actos de profunda ignorancia. Pero también el que ordena matar a hierro a quien mató con hierro se sube al mismo vagón de la ignorancia. Hay millares de trenes con vagones llenos de mentes vagas en sabiduría.
Ocupar el más alto poder es la responsabilidad más grande y esta posición si no se realiza bien puede llegar a ser la peor lotería que podría tocarle a una persona, ya que su nivel de conciencia es muy inferior a la posición que ocupa.
En una empresa a mayor cargo mayor debería ser el nivel de conciencia. En el área familiar o social, ser padres requiere un mayor nivel de conciencia y preparación que la vida de solteros. Los padres sin preparación o con bajo nivel de conciencia pueden a trasladar a sus hijos sus debilidades y problemas personales por su inmadurez e ignorancia. El drama viene cuando los hijos han crecido y si comenten errores son castigados cruelmente. Este es el típico comportamiento del autoritario, podar o aniquilar en los demás aquello que mal-habita en él. Se castiga a los demás por las propias faltas que no se admiten tener, en otras palabras sería como decir que el pecador quiere eliminar el pecado de los demás pero no el suyo.
Ofender para liderar, tratar de hundir al adversario, poner la zancadilla, buscar culpabilidad falsa, es propio de ineptitud.
Los errores cometidos en cargos o ámbitos pequeños tienen menos responsabilidad kármica, pero los errores que comenten los altos cargos entrarían en el rango de karmas indeseables.
La obsesión por alcanzar un alto cargo es en sí un deseo mal encaminado. Los posicionamientos que vienen por la fuerza, astucia o suplantación, luego tienen una caída considerable.
Cuanto más alto sube el árbol sin raíces, más dura será su caída.
Las personas evolucionadas no tratan de ser, simplemente son y no tratan de liderar, porque el liderazgo no se realiza desde el nivel de la apariencia ni de la silla sino desde el nivel de la raíz, de aquello que más ha crecido dentro de la persona.
Si la naturaleza otorga un alto cargo o responsabilidad será porque las raíces son tan profundas como para conectar la propia naturaleza con el pueblo.
El mejor gobierno es simplemente aquel que lleva el funcionamiento de la naturaleza al funcionamiento social y humano. El gobernador no gobierna sobre las personas, gobierna la Ley Natural para que llegue a la vida humana y social, porque toda vida vivida de acuerdo a la Naturaleza siempre será evolutiva, progresiva, abundante y pacífica.
Fracasarán siempre aquellos que tratan de imponer sus ideologías particulares, sus inventados sistemas de administrar la sociedad. La imposición de ideologías creadas por el hombre no tienen ninguna capacidad de Unificar, solo DIVIDEN más. Cuantas más ideologías más divisiones existen.
El mejor Gobierno es que actúa desde el nivel Unificador, desde el nivel de la Inteligencia que administra todo el Universo de forma ordenada y progresiva. Este arte de Gobernar está en la raíz de la existencia humana, en la Conciencia Pura. En ese nivel el Gobernador opera desde el funcionamiento más básico. Nada inventa, porque ya está todo hecho, esto quiere decir el dicho NO HAY NADA NUEVO BAJO EL SOL.
Saber Gobernar es saber llevar Vida allí donde hay caos, llevar abundancia donde hay miseria, llevar empleo o funcionamiento allí donde no se sabe operar ni a valerse por sí mismo.
El mejor Gobernador es el que sabe enseñar a otros cómo gobernarse, cómo traer la Luz de la Vida a esta tremenda ceguera social que nos divide y enfrenta continuamente. De seguir así como va la sociedad hasta los mejores posicionados caerán de sus elevadas torres.
El mundo tienen que cambiar, y el patrón de juego ya está establecido.
Dijo el sabio que los más sencillos de corazón y alma traerán el cielo a la tierra, pero los listillos no saben ver esto, solo persiguen sus nubes, dedican todo su vida por seguir sus inventadas creencias con el resultado de seguir dividiendo, creando enfrentamientos y pobreza continua, aunque su eslogan sea la nación unida jamás será vencida.
La propiedad más grande, el tesoro más grande, y la máxima felicidad está habitando en el más tierno funcionamiento de la naturaleza, en la pureza de la Vida, donde la Inteligencia domina y el Conocimiento colma todas las expectativas.
El diseño para el mejor funcionamiento social ya fue establecido desde el inicio de la creación, nada más queda encontrar esa corriente cósmica en la profundidad de la mente, allí donde el orden impera en medio de una tremenda fuerza de diferencias, porque las diferencias existen dentro, pero es la Inteligencia la que hace que el Orden prevalezca.
La riqueza de la vida es mayor cuantas más diferencias coexisten en medio de la Unidad de la Ley Natural.
Defiende tus intereses y de tu familia simplemente creciendo dentro de ti, y deja de buscar y seguir inventos humanos, no busques algo nuevo bajo el Sol, porque fuera solo encontrarás sombras, tus propias sombras y aquellos que caminan fuera cada día con el orgulloso zapateo de ser los mejores, diferentes, y esas otras cosas que la vanidad cultiva.
El Conocimiento completo de la vida y la razón de la existencia humana está en alcanzar la meta, o lo que es lo mismo alcanzar el origen de la creación, pero sin volver atrás, sino en volverse hacia dentro de uno mismo.