Por David Kahra.- Se requiere coraje y valentía para seguir este llamado que se expresa en tu sentir, que a veces te dice: «Deja eso que has construido, y que en el fondo ya no deseas seguir haciendo, es momento de ir más allá de lo que conoces, adentrarte en la incertidumbre, en lo que para muchos podrá ser una gran locura«. Sí, y una parte de mí a veces lo piensa.
Renunciar al trabajo que fue tu realidad durante varios años, cambiar tu enfoque, dejar de lado esa normalidad, en verdad requiere valor. A veces me digo a mí mismo, ya sabes la respuesta, sin embargo, una cosa es saber la respuesta y otra es confiar en dar el primer paso hacia ella, y esa es la batalla que se libra cuando queremos ir más allá de lo natural, de lo cotidiano, para abrazar lo desconocido, lo sobrenatural, lo extraordinario y lo milagroso.
Estoy a punto de soltar lo que durante mucho tiempo fue una parte de mi realidad, y sí, siento temor, pero elijo confiar, elijo seguir ese llamado que me dice, confía, no pienses en el cómo, ten la certeza de que todo te será dado para que el propósito que ha elegido tu corazón, vea la luz con mayor intensidad.
Dejo este mensaje como una prueba -de fe- para una versión de mi yo, que en un futuro lo leerá, y dirá:
– Gracias, porque desde ese momento, fue posible aquello que hoy es mi realidad.
Hay elecciones que nos hacen crecer, hay momentos en los que es importante confiar, y esos instantes son los que hacen trascender nuestra experiencia humana, y la elevan a la divinidad.