El tigre de Malasia, una especie exclusiva del centro y sur de la península malaya, está hoy en el punto de mira. Mientras que, en el año 1950, había 3.000 individuos, en el 2021 solo quedan 200 que se consideren sexualmente maduros.
Esta drástica disminución los posiciona en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (INCU), bajo la categoría de “en peligro crítico”.
“Sin una intervención importante e inminente, los Tigres Malayos desaparecerán en un periodo no superior a los dos años” asegura el portavoz del complejo forestal de Malasia.
Las principales causas de su probable extinción son la caza furtiva, la deforestación y transformación de su hábitat y la reducción de la biodiversidad (y, por tanto, de las presas a las que cazaban para alimentarse).
En marzo de este año, abrirá sus puertas el Centro Nacional de Conservación del Tigre, que contará con personal dedicado a buscar y deshacer las trampas colocadas para estos animales, así como agentes que patrullarán la zona para rastrear y apresar a sus cazadores furtivos.