Noticias Mindalia.- ¿Quién no ha envuelto un regalo pequeño en miles de capas de papel hasta hacerlo enorme? A la gente le divierte participar en ese juego en el que el festejado se entretiene largo y tendido en quitar todo el envoltorio de su presente. Pero el desperdicio es enorme, y el medio ambiente tardará años y años para deshacer ese envoltorio nada ecológico.
¿Podemos envolver regalos y evitar a la vez esta mala digestión a la naturaleza? Existe una idea divertida y respetuosa con nuestro entorno, los envoltorios textiles biodegradables. Es cierto que el papel siempre es más barato, pero el inventor de esta idea lo ha convertido en un juego que gira alrededor del planeta.
Se llaman InfinitLoop, y Didac Ferrer es el creador que diseñó este embalaje reutilizable y además geolocalizable. Y es que cada envoltorio tiene una etiqueta con un código QR que permite saber por qué lugares ha pasado y qué regalos ha contenido. ‘Es un juego para incentivar que pase de mano en mano y crear una comunidad de consumidores responsables’.
Más aún, InfinitLoop no solo pretende colaborar con el medio ambiente sino que además busca dar empleo a personas en riesgo de exclusión. Así, este envoltorio es fabricado y comercializado por dos ONG dedicadas a la inclusión laboral, la Asociación Estel Tapia y la Fundació Pare Manel.
Cualquiera puede fabricarse un InfinitLoop en casa, los patrones están disponibles gratis en su página web. Pero la gracia está en seguirlo por el mundo, para lo que es necesaria una etiqueta con el código, cuyo precio es de dos euros.
El proyecto se convirtió en una realidad hace un año y ya hay más de 1.100 recorriendo el mundo. Algunos ya han viajado por Europa y han llegado hasta Latinoamérica.