Nuestro cerebro ya se acostumbró hace mucho tiempo al efecto que tiene la gravedad en nuestro planeta y cómo se comportan los objetos ante ella. De hecho, podemos distinguir muy bien la consecuencia que esta tendrá si dejamos caer una pluma o un balón.
Es por eso que, cuando vemos objetos muy grandes y voluminosos en perfecto equilibrio en posiciones “imposibles”, nuestro cerebro manda una señal de alerta advirtiéndonos de que algo no va bien.
Uno de estos objetos es la roca gigante Kummakivi; que se encuentra en Roukolahti, al sureste de Finlandia. Esta roca pesada y gigantesca lleva once mil años sobre otra roca, pareciendo como si estuviese flotando en el aire en perfecta armonía con la naturaleza.
Antaño se decía que la roca fue colocada en el lugar por gigantes, pero, sin pruebas fehacientes de la existencia de estos, se buscaron otras posibles respuestas a su origen.
Teniendo en cuenta que, por su densidad, era imposible que fuera colocada por los humanos, los geólogos encontraron la respuesta más realista: Glaciares. Estos (capaces de arrastras rocas tan pesadas) la dejaron atrás al retroceder hacia el norte hace algunos miles de años.
Aunque este fenómeno no es muy común, podemos encontrar grandes rocas en equilibrio en otros lugares del mundo:
· India: Bola de mantequilla de Krishna (también conocida como Vaanirai Kal).
·Italia: Pietra Pendula.
·Arizona: Marble Canyon y Chimenea de hadas.