El poder de la amistad aumenta con la edad y puede llegar a superar la intensidad de las relaciones familiares, ha descubierto un estudio publicado recientemente.
El estudio, realizado por el profesor William Chopik de la Universidad Estatal de Michigan, utilizó datos de 280.000 personas recogidos en dos encuestas para llegar a esta conclusión.
En la primera encuesta participaron 271.000 personas de todas las edades procedentes de 100 países. Su objetivo era descubrir los vínculos entre las relaciones, la salud y la felicidad. La segunda encuesta, en la que participaron 7.500 personas, estuvo consagrada a determinar las relaciones que se producen entre personas aquejadas de una enfermedad crónica.
Analizando ambas encuestas, los investigadores descubrieron que las amistades se hacen cada vez más importantes para que una persona se sienta bien y sana a lo largo de su vida.
Además, los resultados muestran que, en el caso de las personas mayores, los vínculos de amistad son un indicador más determinante para la felicidad y la salud de las personas que las relaciones familiares.
Según Chopik, conservar buenos amigos puede cambiar la vida en relación a la salud y a la felicidad, por lo que no es descabellado dedicar tiempo a las amistades con las cuales nos sentimos bien.
Los resultados del primer estudio ponen de manifiesto que las relaciones familiares y amistosas están relacionadas con un mejor estado de salud y con el bienestar general, aunque las amistades se convierten en algo mucho más importante con la edad.
Las conclusiones del segundo estudio descubren también la importancia de la amistad, pero con un matiz. Cuando las amistades son una fuente de tensión, los encuestados señalan más problemas de salud unidos a enfermedades crónicas. Sin embargo, cuando los amigos son un apoyo, los encuestados se definen como más felices.
Chopik explica que la misma naturaleza de la amistad explica estos resultados, ya que tendemos a eliminar las amistades tóxicas y a centrarnos en las que nos ayudan y nos hacen sentirnos bien. Asimismo, subraya que los amigos pueden constituir un apoyo para las personas solteras o los que no pueden contar con su familia en caso de necesidad.
De esta forma, subraya Chopik, los amigos previenen la soledad de las personas de edad que viven un duelo o que redescubren la vida social después de su jubilación. En cualquier caso, las relaciones familiares son por lo general agradables, aunque pueden verse afectadas por situaciones negativas o monótonas.
Ahora hay algunos estudios que empiezan a mostrar cuán importantes pueden ser las amistades para los adultos mayores. Estos estudios muestran que las amistades predicen la felicidad cotidiana y en última instancia cuánto tiempo viviremos, más que las relaciones conyugales y familiares «, explica Chopik.
«Las amistades nos ayudan a evitar la soledad, pero a menudo son más difíciles de mantener a través de la vida», concluye. «Si una amistad ha sobrevivido a la prueba del tiempo, sabes que debe ser buena, ya que tienes a quien recurrir para obtener ayuda y consejo y es por ello una persona a la que querrías tener en tu vida».