Por Anna Colomer.- De repente parece que hemos subido a la máquina del tiempo y vivamos la época de la inquisición, eso si, nos llenamos la boca de palabras como, globalización, libertad, respeto, compromiso, y mil palabras más, y que hacemos en realidad? Ir a la caza de las terapias complementarias!.
Aquí nadie tiene la razón, nadie tiene el poder absoluto en la curación, ni la medicina convencional ni las terapias complementarias, la realidad de esta cazería desmesurada tiene una razón simple, el poder económico, de donde el gobierno puede recaudar más en lo establecido en la sociedad como un hecho científico.
La solución según mi humilde visión pasaría por legalizar las terapias complementarias como dios manda, primero por el hecho de estar normalizadas recibiría unos ingresos el estado y por otra parte los profesionales que se dedican a las terapias complementarias con conocimientos del cuerpo humano, y de diferentes especializaciones como tiene la medicina convencional, esto les ayudaría a diferenciarse de algunos nombrados «terapeutas» que sin conocimientos ni estudios previos juegan con la salud física y mental de la gente, jugando en contra de los terapeutas con estudios y utilizar la ética a la hora de trabajar con personas, cosa que pasa igual en el termino de la medicina convencional pero el solo hecho de estar titulado como medico tiene derecho a fallar.
Terapias complementarias como puede ser la acupuntura a día de hoy se estudian en las universidades, miles de centros hospitalarios de todo el mundo incluidos hospitales españoles ofrecen la especialización de Reiki a sus pacientes, un masajista conoce todo el sistema oseo, circulatorio, muscular, glandulas, y así podría continuar la larga lista. Me gustaría hacer una pequeña reflexión, la medicina convencional lo cura todo? Tienen el poder sobrenatural sobre la salud? En los hospitales sobreviven todas la personas ingresadas? Sean sinceros en su respuesta, pues lo mismo ocurre con las terapias complementarias, solo hay una gran diferencia, unos se consideran dioses y los otros brujos, de hay la cazería de brujas en la inquisición.
Realmente los gobernantes quieren y buscan el bienestar y la salud de las personas? O solo están a merced de los grandes lobbies farmacéuticos? Repito, la solución es simple, y pasa por la legalización y una normativa, para que el paciente sepa donde entra y quien le va a ayudar en su salud, y concientes que cada tipo de medico o terapeuta está inscrito en un termino y especializaciones diferentes.
Me gustaría que este escrito sirviera de reflexión, a día de hoy en mi centro de terapias un número muy elevado de clientes me llegan después de años de buscar la solución a sus problemas de salud en la medicina convencional y seguir con el problema de salud llegan a probar otras alternativas, estoy segura que muchos de mis compañeros de terapeutas complementarios están en esta misma situación, solo hay un secreto, actuar desde el respeto, la ética, el compromiso hacia todos los seres humanos, y sin duda desde el amor y con mucha humildad, sea cual sea si medico o terapeuta, teniendo en cuenta el poder de la salud y en ningún caso el poder económico.
Anna Colomer