Un estudio llevado a cabo por científicos estadounidenses y publicado en una importante revista relacionada, ha afirmado ya que, hace 359 millones de años, hubo una extinción masiva en nuestro planeta.
Responsable de esto fue la explosión de una supernova, que colapsó la capa de ozono provocando un calentamiento que hizo desaparecer a casi un 85% de las especies.
Hace unos 354 millones de años, durante lo que conocemos como período Devónico, la gran mayoría de especies vivas se encontraban en los océanos. La ciencia sabía que algo había supuesto un cambio muy importante en la biodiversidad del planeta, dañando gravemente su ecosistema.
Ahora y, gracias a la observación de rocas con esporas de plantas prehistóricas gravemente quemadas por luz ultravioleta, se puede confirmar la teoría de que, la atmósfera, se enfrentó a una falta prolongada de ozono que nada tiene que ver con fenómenos terrestres como una erupción volcánica o el calentamiento global.
“A día de hoy, por ejemplo, la amenaza de supernova más cercana es la estrella Betelgeuse, que está a más de 600 años luz de distancia” aclara una de las autoras del estudio. “El mensaje general de nuestro estudio es que, la vida en la Tierra, no existe aisladamente. Somos ciudadanos de un cosmos más grande y este interviene en nuestras vidas; a veces de forma imperceptible y otras con ferocidad”.