La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, tras años de trabajo conjunto con los estados miembros de la Unión Europea, ha detallado un documento legal que entrará en vigor en los próximos días y que limita la presencia de contaminantes cancerígenos como el cadmio y el plomo en los alimentos comercializados en el continente.
El cadmio es un contaminante ambiental sobre todo presente en frutas, verduras, cereales y semillas. Por su parte, el plomo se encuentra en productos lácteos, setas y especias.
“Una dieta poco saludable aumenta el riesgo de padecer cáncer. Esta nueva legislatura pretende poner a los consumidores en primer lugar, para reforzar las medidas de categoría mundial en la UE respecto a la alimentación. Aumentaremos la seguridad alimenticia de nuestros paisanos” afirma la comisaria europea de sanidad.