Las líneas de Nazca se extienden por el desierto peruano y solo son reseñables desde las alturas. Se tratan de un conjunto de figuras geométricas de animales, personas y plantas realizadas por la cultura nazca y cuya función aún no ha sido resuelta.
Las figuras no fueron descubiertas hasta 1930 debido a la superficie plana del desierto.
Destacamos las formas más famosas y representativas: la araña, el mono, el colibrí, el cóndor, el pelícano, la ballena, la serpiente y la llama.
Estas figuras llevan años intrigando a los científicos, que han barajado diferentes teorías sobre cuál fue su función y qué significan. Estos geoglifos datan de la época precolombina y ahora, científicos japoneses creen que tienen una teoría fundamentada de su significado: podrían haber sido una manera de marcar caminos y senderos.
Los investigadores, han descubierto desde el año dos mil cuatro más de trescientas figuras y han llegado a la conclusión de que existen dos tipos: lineal y de relieve.
Las de tipo lineal existen al principio y al final de caminos rectos, mientras que las de tipo relieve, están al costado de los senderos que no son rectos y suelen estar dibujadas en pendientes. Debido a que esta es una civilización que no tenía letras, esta podría ser la manera más efectiva de guiarse por el amplio desierto.