Actualmente, para producir los alimentos que terminan en la basura, se utiliza la cuarta parte del agua dulce que se ocupa en la agricultura en todo el planeta, a esto hay que sumarle los 300 millones de barriles de petróleo que facilitan la producción y el transporte de los productos que llegan a los comercios tras recorrer miles de kilómetros.
En el mundo se utilizan 1.400 millones de hectáreas para producir los alimentos que no va a consumir nadie. Producción mundial que está por encima del 60% de lo que se necesita para alimentar a la humanidad.
Según datos de Naciones Unidas, se desperdicia un tercio de la producción mundial de alimentos, es decir 1.300 millones de toneladas métricas al año.
Es por eso que, cada persona tiene una responsabilidad grande para incentivar un sistema socio económico respetuoso con los derechos humanos y la tierra.