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Por Natalia S. Castrege.- El alimento que ingresamos en nuestro cuerpo es tan importante que nos define y nos condiciona. En el artículo “Consciencia del cuerpo para una vida saludable” hablábamos de la importancia del descanso, el ejercicio y la nutrición para gozar de una buena salud física y mental, y cómo nuestras emociones y pensamientos pueden generar enfermedades o sanarnos.
Recordemos que nuestro cuerpo es nuestro envase, nos va a acompañar toda nuestra vida, y es nuestro deber y responsabilidad ser conscientes de esto y cuidarlo, tengamos la edad que tengamos.
Alimentarse no es igual a nutrirse, y es importante conocer esta diferencia. Por eso, en este artículo vamos a centrarnos en cómo podemos ser conscientes de nuestra alimentación: qué elegir comer, cómo combinar alimentos para obtener todos los nutrientes, por qué existen mitos que nos condicionan a elegir de tal o cual manera, cómo se relacionan los alimentos con las enfermedades y éstas con las emociones, y cómo podemos practicar el acto de comer conscientemente cada día.
Para contestar estos interrogantes y desmitificar algunas cuestiones que aún hoy, con toda la información disponible, seguimos sosteniendo como ciertas, consulté a diferentes profesionales, especializados en nutrición general y deportiva, veganismo y medicina ayurvédica.
Gabriel Fantuzzi es licenciado en nutrición de la UBA Argentina, especializado en nutrición deportiva. Es docente universitario y actualmente cursa la carrera de doctorado en ciencias de la salud, en un proyecto de prevención de diabetes. Asesora equipos de running, trabaja en un club de rugby y con la selección nacional argentina de canotaje femenino.
CÓMO DEFINIMOS A UNA PERSONA SALUDABLE?
Definir a una persona saludable es muy amplio, pero referido a lo mío, en lo nutricional, creo que más allá de los valores clínicos o datos de laboratorio, que por supuesto tienen rangos de normalidad, ser saludable es alimentarse variado, comer de todo. Uno puede tener restricciones, como los veganos o vegetarianos pero mientras haya un balance de macronutrientes, uno los puede cubrir con origen animal o vegetal: vitaminas, minerales, carbohidratos, proteínas, grasas. Y también es tener buenos hábitos, por ejemplo a la hora de sentarse a comer.
¿CÓMO PODEMOS, HOY EN DÍA, SER CONSCIENTES DE LA IMPORTANCIA DE NUESTRA NUTRICIÓN, DESDE EL MOMENTO EN QUE COMPRAMOS LOS ALIMENTOS, LOS COMBINAMOS E INCLUSO EN EL ACTO DE SENTARSE A COMER?
Prestarle atención a lo que uno come, sentarse a comer es el momento para comer con otros. Evolutivamente siempre fue así, sentarse a comer para conocer a otros, intercambiar ideas, charlar, aunque eso se ha perdido mucho con la velocidad en la que vivimos, con la tecnología. Ya uno no le presta atención a lo que come, la gente no piensa ni mira lo que está comiendo, es uno de lo grandes problemas y de las enfermedades crónicas, como la obesidad, pero también de todas las enfermedades relacionadas. Particularmente estoy trabajando en un proyecto de prevención de diabetes y la mala alimentación o el ritmo de vida, el sedentarismo, hace que las estadisticas aumenten y empeoren año tras año, en todo el mundo.
Como le digo a los deportistas el alimento es el combustible con el que nos movemos. Yo no creo que nadie a un auto de alta gama o al auto que maneje le pondrá el peor combustible, y el ser humano hace eso, con la diferencia de que al auto lo podemos cambiar, y al cuerpo no. El envase es el mismo, el cuerpo es el mismo hasta que nos morimos, y sin embargo no lo cuidamos.
Creo que tenemos que remontarnos a la época de los abuelos o bisabuelos y volver a lo natural, comer lo que sale de la tierra o de un árbol y no de cajas, envases y latas. Y si es de cajas, envases y latas, leer las etiquetas, informarnos. Tiene que ver con la educación y como profesionales tenemos que empezar a educar.
Muchas veces se le atribuye a la falta de tiempo y se recurre a lo rápido en el supermercado. Pero si lo pensamos, lleva el mismo tiempo sacar una verdura y cocinarla que ir al supermercado y comprar un envase cerrado y cocinarlo. Son excusas, pero hay que cambiar los hábitos, y éstos no se cambian de un día para otro, pero creo que hay que apuntar a eso.
A los deportistas se los recalco mucho, sentarse en la mesa, mirar lo que uno come, prestarle atención al plato, darle variedad, que aparezcan los colores, diversos vegetales, todos aportan nutrientes diferentes que necesitamos. Un deportista, un corredor no puede vivir a fideos, como la gente cree, necesita variedad.
¿HAY UNA DIETA PARA TODAS LAS PERSONAS? ¿QUÉ RECOMENDÁS TENER EN CUENTA PARA PODER LLEVAR ADELANTE UNA DIETA A LARGO PLAZO?
Hay un principio básico en la nutrición que es la ADECUACIÓN. Es una de las grandes leyes de la nutrición. Adecuar el plan alimentario a cada persona. No existe una dieta para todos, o la “dieta del deportista”, o la “dieta para bajar de peso”. Todas las personas somos distintas, y creo que el secreto para la continuidad de un plan alimentario, también está en eso. Nosotros como profesionales debemos adecuar ese plan según los hábitos, creencias, gustos de esa persona. Por eso el plan individual es fundamental. Que sea agradable, que sea fácil de llevar, que no complique. Por eso nosotros no hablamos de dieta, hablamos de un plan alimentario, cambiar hábitos, educar. Necesitamos meses para instalar un solo hábito, pero es un trabajo del día a día.
Si una persona es vegana o vegetariana, yo no voy a inculcarle comer carne para obtener proteína animal o vitamina B12 que no está en los alimentos de origen vegetal. Mi tarea será adaptarme a ese plan, para que cubra todos los requerimientos de esa persona.
HAY MUCHOS MITOS EN RELACIÓN A LA COMIDA, COMO POR EJEMPLO QUE HAY CARNES MEJORES QUE OTRAS, EN CUANTO AL CONSUMO DE LA LECHE O LOS HUEVOS, LAS PROTEÍNAS, LA DEFICIENCIA DE DIETAS VEGETARIANAS O VEGANAS. CUÁNTO DE ESTO ES CIERTO Y A QUÉ SE DEBE ESTA “DESINFORMACIÓN”?
Hay muchos mitos, mediante las redes sociales hoy se escucha de todo. Sería muy amplio hablar de cada mito. Depende desde que punto hay una carne mejor que otra, por el contenido graso, el origen, la calidad. Respecto a los lácteos hay dos posturas: a favor y en contra. Yo no estoy en la postura de “los lácteos son el demonio, no hay que consumirlos”, pero considero que se consumen en exceso y que no es necesario para mejorar la densidad mineral ósea. Hay deportistas que no consumen lácteos y la densidad mineral ósea es excelente.
El hueso mejora con ejercicio y sol, y el calcio podemos obtenerlo a través de fuentes vegetales. Hay muchos mitos de la alimentación vegetariana o vegana, yo también los tenía. Pero, hace un par de años comencé a trabajar con deportistas veganos y vegetarianos y rinden perfectamente, tienen altos valores de energía, buenos valores de masa muscular. Si es una persona que cambió su alimentación hace poco, la adecuación del plan no es sencilla, pero se pueden cubrir perfectamente requerimientos sin tener déficit, a pesar de que desde la medicina se pondera que si o si hay que comer carne o lácteos para cubrir proteínas. Con la proteina vegetal se puede cumplir perfectamente.
Basta con revisar estudios epidemiológicos, en culturas que no consumen lácteos ni proteína animal y no encontrar déficit. Sobretodo observando culturas que tienen bajos consumos de calcio, son los que menos osteoporosis u osteopenia tienen. O sea que algo está mal con esas recomendaciones. Obviamente presión de las industrias lácteas en el mundo, o estudios subvencionados o pagados por la misma empresa láctea, eso pasa en general en la ciencia.
Pero creo que no hay que ser extremista ni demonizar las carnes ni los lácteos, es simplemente comer con moderación y adaptarse al gusto de cada uno.
COMO ESPECIALISTA EN NUTRICIÓN DEPORTIVA Y RENDIMIENTO, CUÁLES SON LOS FACTORES PRINCIPALES PARA PODER RENDIR MEJOR EN TODOS LOS ÁMBITOS DE NUESTRA VIDA.
Para rendir bien y tener energía, es fundamental mantener la actividad física, la variedad en la alimentación, no tiene que ser una alimentación monótona desde ningún punto de vista. Las carnes podemos no manejarlas o si, pero con moderación. Por ejemplo en Argentina tenemos un consumo con poca variedad de alimentos, legumbres y cereales. Es una tarea nuestra, educar, hacerle conocer a la gente “nuevos” alimentos, que lo remarco porque no son alimentos nuevos, son ancentrales, pero se consumen poco.
Uno habla de comida, pero hidratarse es fundamental. El agua va a ser siempre la mejor bebida. Siempre pongo el ejemplo de los perros o cualquier animal, nosotros no le damos ni jugos ni bebidas colas.
Lo mejor es el agua y no hay dudas. Si buscamos darle sabor, podemos usar jugos de limón o frutas y no químicos o polvos, que son los jugos concentrados.
Pero básicamente hidratación, alto consumo de frutas y verduras y cubrir, sobretodo en deporte, una cierta cantidad de proteínas mayor a la persona sedentaria, que pueden ser de origen animal con moderación o de origen vegetal.
La grasa animal hay que consumirla en las mínimas cantidades.
Natalia Solange Castrege
