Home » Artículos » Palabra gatillo: Beso a la divinidad

Palabra gatillo: Beso a la divinidad

Por Rosa Mª Francés Cardona (Izha).-  Realmente estoy radiante ante esta herramienta.
Antes de compartirla siempre la probamos.

Llegó a nosotras de forma ¿casual? Ja, ja, ja; sabemos que nada es casual.
Realmente solo el usar esta palabra ya me hace sonreír; me llena de paz y tranquilidad; me ayuda a la introspección; me recuerda que soy hija de la divinidad, que soy parte de ella. Y precisamente ello me da derecho a su cobijo, su abrazo y nada ni nadie me puede apartar de ella.

¿Cuál es el origen de esta herramienta?

Esta herramienta nos la proporcionó Mabel Katz no hace mucho tiempo (creo que sobre abril del 2020).

Realmente le fue dada por el Dr. Leen para el cual esta era una de sus herramientas queridas y más personales. El Dr. La recibió de Morna y la compartió con Mabel cuando ella era su pupila y esta la olvido hasta que no hace mucho tiempo. Mediante un mensaje Saint Germain le pidió una herramienta especial para estos nuevos tiempos y debido a todas las situaciones planetarias que estamos pasando y a todas las pandemias* en las que andamos metidos. Además le recalcó la importancia de tener fe y de colocar la flor de lis sobre las situaciones.
Y si, digo: pandemias* en plural:
Pandemias de odio, miedo, ira, rencor…

Esas son las más contagiosas y las más peligrosas.
Gracias a esta herramienta nos ayudará a limpiar, limpiar, limpiar y sobre todo a no caer en el miedo.

¿Para qué sirve esta herramienta?

Esta herramienta sirve para llenar nuestra vida de amor y tranquilidad, conectándonos con el amor puro e incondicional del Universo.

Podemos imaginarnos como lanzamos un beso a la divinidad, a esa energía, a ese ser…, mientras recitamos esta oración:
“Yo desde mi corazón y conciencia beso a la divinidad.

Beso a la divinidad, beso a la divinidad, beso a la divinidad…”

La divinidad nos dice: «Cuando tú te mueves, Yo me muevo. Cuando tú das un paso, Yo doy un paso. Cuando tú avanzas, Yo limpio el camino, pero ni un minuto antes ni un minuto después».
Así pues:

“Vayamos puros de corazón, donde sea que vayamos y cuando tú cambias, todo cambia.”

¿Cuándo la uso?
-Cada vez que te dejas llevar por el miedo:
Beso a la divinidad.
-Cada vez que ves las noticias:
Beso a la divinidad.
-Cada vez que hablas con alguien de estos temas:
Beso a la divinidad.
-Cada vez que sepas que alguien está enfermo:
Beso a la divinidad.

También te puede interesar

La Coherencia Cardíaca: puerta al bienestar

La coherencia cardíaca, más que una mera medida médica, se ha revelado como una herramienta ...

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *