Cuiabá, en Brasil, es sede inaugural de las primeras paradas de autobús con paneles solares y techo verde; utilizando antiguos contenedores de carga y dándoles una función sostenible.
Para hacerlo posible, estos contenedores son previamente modificados y adecuados para su nuevo uso. Su estructura cambia y se pintan de otros colores. En su techo, se instala un jardín de plantas que favorecen el aislamiento térmico aportando un aspecto verde a la urbe. Además, incorporan también paneles solares. En su interior tienen micro bibliotecas, puntos USB de carga e incluso pantallas LED con los horarios de paso actualizados.
Se han construido ya paradas modelo, con el objetivo de publicitarlas y que más ayuntamientos se decanten por su implantación. Haciéndolo, se garantiza una nueva y resolutiva utilidad a las estructuras, reduciendo la producción de desechos.
El programa recibe el nombre de “adopta una parada” y pretende resaltar la necesidad indiscutible de trabajar en pos de la sostenibilidad. Hay ya otras capitales y Estados del mundo que se sienten atraídas por esta iniciativa.