En Canberra, la capital de Australia, se recoge la primera prueba de aprendizaje vocal en un miembro de la familia Anserinae (patos, gansos y cisnes). Se trata del pato Ripper, que fue criado en la Reserva Natural de Tidbinbilla y que aprendió a imitar el sonido de una puerta al cerrarse y una frase muy peculiar: “maldito tonto”.
Los científicos no saben cómo pudo el pato aprender a pronunciar la frase, aunque teorizan que, probablemente, fue algo que su cuidador debió repetir en varias ocasiones a lo largo de su vida.
Este hecho, grabado en casete, tuvo lugar el 26 de Julio de 1987, aunque no es hasta ahora que ha sido publicado en una reconocida revista científica.
“La región telencéfalo en el cerebro de estos animales interviene en el aprendizaje vocal de pájaros cantores y loros , siendo relativamente más grande que la de otros grupos de aves. Lo que desconocíamos es que, los patos, también poseían estas mismas cualidades” indican los autores del estudio. “Aunque estos sonidos se habían descrito antes, nunca se habían analizado con detalle hasta ahora. El aprendizaje vocal en el pato almizclero representa un caso de evolución independiente y, por tanto, es importante investigar otras especies relacionadas”.