Por Isabel María Campillos Pérez.- Estás en el lugar y tiempo justo.
Ayer hablaba con una amiga acerca de esto.
¿Cómo es posible que las cosas se den de una determinada manera?
¿Cómo cuando lo que tienes que experimentar por mucho que te resistas te abraza?
¿Cómo cuando no tienes que vivir algo no hay manera de experimentarlo?
El transcurso de la vida se puede modificar, ahora bien, hay una parte no modificable que nos toca afrontar.
Esa parte es la que nos libera y nos conecta con nuestra sanación interior, con nuestro autodescubrimiento.
Me doy cuenta de que todos somos muy parecidos, en distintos estadíos evolutivos.
Personas con grandes corazones y ambiciones imperantes.
Ese gran corazón que te dicta y dictamina la sentencia que abrirá la puerta más grande y hermosa para ti.
La intuición…
Todos poseemos este gran atributo que se nos dio al nacer, que poco la utilizamos…
Todos somos intuitivos, tenemos esa mágica sensibilidad que nos transporta allí donde debemos estar y ser con todos nuestros matices.
«No se por qué, pero debo estar ahí»
«No lo entiendo, pero lo siento»
«No tiene lógica, pero tiene mi sentido»
¿Alguna vez te has pronunciado estas frases?
No tienes que saber todas las respuestas a tus preguntas, no te apresures.
Mejor entiende el idioma de tu corazón, tu víscera más sincera.
Me costó mucho llegar a hacerle caso a pesar de no ser lo políticamente correcto.
Pero el contenía el código de mi sanación. Por eso…
Atiende a su melodía, día a día.
Si sientes un impulso hazlo, pues el camino va iluminandose con los pasos.
Ve a por eso que tu intuición te dice.
No estás loc@ por ello, estas protegido por la gran majestuosidad Universal.
Ella provee lo que necesitas en cada instante, ella te conecta con tu Ser y te da eso que necesitas para transceder la duda y el temor.
Vas a experimentar cosas maravillosas si te dejas llevar por la gran sabiduría que anida en lo más oculto de tu interior.
Señales, magia, casualidades.
Amor, calma, bienestar.
Aprendizajes, lecciones, plenitud.
Y para eso venimos a este mundo, para conocernos totalmente y descubrir todo nuestro potencial oculto.
Para trascender miedos y derribar murallas que nos impiden sentir al cien por cien la vida.
Para dejar de empequeñecernos.
Para sanarnos y sanar a otros con nuestro ejemplo.
Y eso me hace muy feliz.
Me doy cuenta de que no soy la única loc@ saludable.
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