
Todo gira y evoluciona en un ciclo natural que si sabemos mirarlo, observarlo, comprenderlo y asumirlo evolucionaremos también. No eres eso que haces, no eres eso que tienes, no eres eso que piensas, deja ya de aferrarte a lo conocido, a la historia; quitemos el velo que cubre nuestros ojos y que nos hace creer que el pasado es mejor cuando en realidad no existe, dejemos que nuestro evolución natural nos guié hacia lo nuevo para crear así nuevas formas y modos de vida. ¿Qué sentido tienen entonces la culpa, el juicio, el perdón, los debería?
Despierta, sólo vives en el instante presente. Si sigues dando vueltas en el pasado (historia, prejuicios, tabús, miedos, etc.) sigues creando lo mismo, repitiendo patrones, no estás en el instante presente y, por tanto, no vives.